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Piscinas de Sal
Relájate en unas piscinas naturales únicas.
HistoriaLugar pintoresco
Sobre este punto
Las Piscinas de Sal de Poza de la Sal son una de las principales atracciones turísticas de la localidad burgalesa, ofreciendo una experiencia única en la que los visitantes pueden disfrutar de aguas salinas en un entorno natural. Estas piscinas se alimentan de las salinas que durante siglos fueron el motor económico de la región, especialmente en la época romana y medieval. Las aguas ricas en minerales no solo proporcionan un relajante baño, sino que también se les atribuyen propiedades terapéuticas, conocidas por mejorar la circulación, la piel y aliviar tensiones musculares.
Estas piscinas están rodeadas por un paisaje espectacular que combina naturaleza y patrimonio histórico, brindando una excelente oportunidad para descansar y disfrutar de la belleza natural de Poza de la Sal.
📖 Un poco de historia
-Época romana: Las salinas de Poza de la Sal fueron explotadas por los romanos, quienes ya aprovechaban los beneficios de la sal tanto para la conservación de alimentos como para la salud.
-Siglos medievales: Las salinas jugaron un papel clave en la economía local, y su explotación continuó durante siglos.
-Siglo XXI: Las piscinas de sal han sido adaptadas para el turismo, ofreciendo una experiencia recreativa y terapéutica basada en las antiguas técnicas de extracción de sal.
💥 Curiosidades
-Las aguas salinas tienen una concentración de sal tan alta que permiten flotar con facilidad, similar a la experiencia del Mar Muerto.
-La zona de las piscinas forma parte del histórico complejo de salinas que ha sido explotado desde la época romana, lo que convierte esta experiencia en un viaje a través de la historia de Poza de la Sal.
-El agua de estas piscinas no solo es relajante, sino que también tiene propiedades terapéuticas naturales, como la desintoxicación de la piel y la mejora de afecciones cutáneas.
💡 Consejos
-Mejor época para visitar: En verano, cuando las temperaturas permiten disfrutar al máximo de las piscinas al aire libre.
-Qué llevar: No olvides protector solar, toalla y una botella de agua, ya que el sol puede ser fuerte en esta área durante el día.
-Cuidado con la sal: No permitas que el agua te entre en los ojos o tendrás una mala experiencia (te recomendamos gafas de nadar). Si tienes alguna herida, es normal que te escueza al contacto con el agua salina.
-Lugares cercanos: Aprovecha para visitar el centro histórico de Poza de la Sal o el Mirador de la Bureba tras un día relajante en las piscinas.
🧐 ¿Sabías que...?
-Las salinas de Poza de la Sal no solo han sido vitales para la economía, sino que también dieron nombre a la villa. Poza hace referencia a las “pozas” o depósitos de agua salada donde se extraía la sal.
-Las piscinas de sal conservan la esencia de las antiguas salinas, brindando a los visitantes una experiencia similar a la de los trabajadores que antaño extraían este preciado mineral.
-El alto contenido de sal en las aguas hace que el cuerpo flote sin esfuerzo, una sensación que muchos describen como una de las más relajantes que se pueden experimentar.
¡Ven a disfrutar de un baño terapéutico en las Piscinas de Sal de Poza de la Sal! Sumérgete en sus aguas y experimenta una sensación única en un entorno histórico lleno de belleza natural. ¡Es el plan perfecto para un día de relax!