Sor[tu.E]gina

Los cinco están en este lugar contando una pequeña historia que no contamos para dormir. Has estado demasiado tiempo dormido. Esta historia te revela la existencia de un cuerpo que porta secretos. El fuego los tiene silenciados, pero ellos, los supervivientes cuentan con palabras, gestos y con su corazón. Sorgina (“bruja” en euskera), vendría de “sortu egin”, parir. En 1609, comenzaron los juicios por brujería en el País Vasco. Y todo se vuelve negro, como la madera, como cuerpos calcinados, como nuestras mentes. ¿Quiénes son estas brujas y magos? ¿Los que aman lo imposible? ¿Las que hacen volar sus faldas? ¿Los que son demasiado viejos? Aquí están sus historias, sin narices torcidas, ni sombrero puntiagudo.