La movida en la Palma y alrededores

Con el dinero que ganó en Telefónica, Pedro compró su primera cámara de Super-8, y dedicó todos sus esfuerzos en grabar cortometrajes y disfrutar de todo el ambiente cultural que le proporcionaba la Movida, el movimiento contracultural surgido en la capital durante los años de la Transición. Su primer largo, Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón, que comenzó a rodar en 1978, refleja muy bien ese Madrid frenético, experimental, divertido y transgresor. Uno de los epicentros de la Movida fue la casa de Costus (la Palma, 14), seudónimo de los pintores Enrique Naya y Juan José Carrero, que aparece en el film. Si bien actualmente el piso es una agencia de comunicación, merece la pena acercarse por varios locales próximos para profundizar en el ambiente de la época: en La Vía Láctea (Velarde, 18) podemos ver las reproducciones de las pinturas con que Costus decoraron este local mítico abierto desde los años 70; en El Penta (la Palma, 4), en cuya esquina Alaska y Almodóvar se conocieron, podemos admirar la figura de Antonio Vega, que inmortalizó el bar en su canción La chica de ayer; en el más reciente bar-museo Madrid me mata (Corredera Alta de San Pablo, 31), nos deleitaremos con los cientos de objetos y recuerdos cedidos por los principales protagonistas de la Movida en sus más de 200 m2 de exposición.