Pastor por un día en familia

¿Quién no ha imaginado una vez en la vida ser pastor? Durante la experiencia, el grupo de visitantes comparte los quehaceres diarios de un pastor: ordeña las ovejas, si hay corderos les da biberón, alimenta de su mano al rebaño y disfruta de la destreza de los perros pastores dirigiendo el rabaño autóctono de ovejas latxa. Al empezar, el grupo experimenta las suaves sensaciones que nos proporciona la transformación artesanal de la lana natural. Utilizaremos diferentes herramientas para trabajar la lana, algunas antiguas y otras modernas. Pasaremos por las diferentes fases del proceso: romper la lana, peinarla y cardarla, para luego descubrir como mediante la espuma de jabón y un divertido masaje podemos convertir esta fibra natural en lo que la imaginación nos pida, bien sea a través de un dibujo hecho de lana o elaborando curiosas pelotas o llaveros que luego cada participante se llevará a casa como recuerdo de la jornada.